Un grupo de ranas viajaba por el bosque, cuando de repente dos de ellas cayeron en un pozo profundo. Las demás se reunieron alrededor del agujero y, cuando vieron lo hondo que era, le dijeron a las caídas que, para efectos prácticos, debían darse por muertas. Sin embargo, ellas seguían tratando de salir del hoyo con todas sus fuerzas. Las otras les decían que esos esfuerzos serían inútiles.
Finalmente, una de las ranas atendió a lo que las demás decían se dio por vencida y murió. La otra continuó saltando con tanto esfuerzo como le era posible. La multitud le gritaba que era inútil pero la rana seguía saltando, cada vez con más fuerza, hasta que finalmente salió del hoyo. Las otras le preguntaron: "¿No escuchabas lo que te decíamos?" La ranita les explicó que era sorda, y creía que las demás la estaban animando desde el borde a esforzarse más y más para salir del hueco.
La palabra tiene poder de vida y de muerte. Una voz de aliento a alguien que se siente desanimado puede ayudarle a terminar el día, mientras que una palabra negativa puede acabar por destruirlo. Cualquiera puede decir palabras que roben a los demás el espíritu que les permite seguir la lucha en medio de tiempos difíciles. Tengamos cuidado con lo que decimos, pero sobre todo con lo que escuchamos.
Finalmente, una de las ranas atendió a lo que las demás decían se dio por vencida y murió. La otra continuó saltando con tanto esfuerzo como le era posible. La multitud le gritaba que era inútil pero la rana seguía saltando, cada vez con más fuerza, hasta que finalmente salió del hoyo. Las otras le preguntaron: "¿No escuchabas lo que te decíamos?" La ranita les explicó que era sorda, y creía que las demás la estaban animando desde el borde a esforzarse más y más para salir del hueco.
La palabra tiene poder de vida y de muerte. Una voz de aliento a alguien que se siente desanimado puede ayudarle a terminar el día, mientras que una palabra negativa puede acabar por destruirlo. Cualquiera puede decir palabras que roben a los demás el espíritu que les permite seguir la lucha en medio de tiempos difíciles. Tengamos cuidado con lo que decimos, pero sobre todo con lo que escuchamos.
CITADO DE LIBRO "LA CULPA ES DE LA VACA"
DE LOPERA Y BERNAL
12 comentarios:
Exelente fábula compañera astral-regional.
Mi padre me la contaba cuando creía que yo era una rana.
Saludos.
http://insomniazul.blogspot.com
Bonita fabula con un gran mensaje...
un beso
excelente fábula....
gracias por darla a conocer
un abrazo
y gracias por tu visita
eres bienvenida cuando quieras...
yo tb te estaré visitando ;)
VH
Hola Carla...
Aquí ando dando vueltas y vueltas.... interesante fábula... me hicistes recordar algunas etapas de mi vida.
Un abrazo grande...
PS: Creo que es mi primer comentario por estos lados.
Si !!!!
Es tu primer comentario en mi blog.
¿Lo celebramos?
Claro que después del sustito de ayer sólo puede ser con un helado ultra-mega-dulce, jojojo
cariños para ti...
Siempre me acuerdo de ti Carla querida, un abrazo...
El que sabe escuchar, también sabe hablar en el momento preciso.
Bonita fabula Carla... Muchas gracias por tu mensaje. Estaba apartada del mundo blogger... La u me tiene sin tiempo, pfff.
Nos leemos Carlita, Cuidate!
Perfecto, ideal para los dìas cotidianos. Para nuestras acciones y reacciones.
caras largas, a un lado. Sonrisas pasen por aquì, las espero y quiero.
Ayùdate, que yo te ayudarè.
"Toma mi mano amiga"
Que maracas las ranas... jajajajaja
A mi por lo general estos cuentos/fabulas no me gustan mucho..
pero está tierna.
Tamos escribiendonos :)
Besos.
Interesnate fábula.. pero poco la entendí jajajajajaja..
Cómo que podrías entrar a actualizar este blog.. digo yo.. así como sugerencia ;)
Saludos para ti..
Eres una Puta!!!!!!!!!
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